Formatter Area y ODS
15 VIDA DE ECOSISTEMAS TERRESTRES
El 30.7% de la superficie terrestre está cubierta por bosques y estos, además de proporcionar seguridad alimentaria y refugio, son fundamentales para combatir el cambio climático, pues protegen la diversidad biológica y las viviendas de la población indígena. Al proteger los bosques, también podremos fortalecer la gestión de los recursos naturales y aumentar la productividad de la tierra.
Actualmente, 13 millones de hectáreas de bosque desaparecen cada año y la degradación persistente de las zonas áridas está provocando además la desertificación de 3600 millones de hectáreas. Aunque un 15% de la tierra se encuentra actualmente bajo protección, la biodiversidad aún está en riesgo. La deforestación y la desertificación, provocadas por las actividades humanas y el cambio climático, suponen grandes retos para el desarrollo sostenible y han afectado la vida y los medios de vida de millones de personas en la lucha contra la pobreza.
A pesar de los grandes desafíos, se están realizando esfuerzos para gestionar los bosques y combatir la desertificación. Actualmente, se están implementando dos acuerdos internacionales que promueven el uso de los recursos de manera equitativa, y también se está realizando inversiones financieras en apoyo de la biodiversidad.
El fondo «The Lion’s Share»
El 21 de junio de 2018, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), en alianza con Mars y FINCH anunciaron la creación del fondo «The Lion’s Share», una iniciativa destinada a transformar las vidas de los animales en todo el mundo, pidiendo a las empresas de comunicaciones que contribuyan con un porcentaje de su inversión en medios, destinado a la ejecución de proyectos de conservación y bienestar animal. Esta iniciativa hará que los socios aporten el 0,5 por ciento de su inversión en medios al fondo por cada anuncio que utilicen con un animal. Lo recaudado será utilizado para mantener a los animales y sus hábitats en todo el mundo. Su meta es recaudar US $ 100 millones por año dentro de tres años, dinero que se invertirá en una serie de programas de conservación de la vida silvestre y bienestar animal, para ser implementados por las Naciones Unidas y las organizaciones de la sociedad civil.